Esperaba un grito, amonestación, perdida de puntos para Gryffindor…¿ir con Filch?, pero lo único que oí fueron los quejidos de Malfoy. Hagrid había ido a regañar a un par de Slytherin que hechizaban al escreguto que se les había encargado cuidar.
-¿Pero que hacen? – dijo preocupado - ¿Qué hechizo usaron? –
Gire de nuevo para ver a Malfoy, que le lanzó el hígado al escreguto que estaba en el piso mientras maldecía. Para sorpresa de todos, el escreguto comió el hígado. He hizo un ruido extraño. Por lo que Hagrid, como todo padre…ah no, lo siento, como ¿todo profesor?....bah, dejémoslo en que Hagrid volteó. Y hizo una sonrisa paterna que me dio miedo.
- Pero, ¡Esta comiendo! – dijo - ¿Quién le ha dado el hígado? –
Crabbe y Goyle apuntaron a Malfoy quien tenía una cara de asco.
- ¡20 puntos para Slytherin! – dijo Hagrid emocionado – Vaya Malfoy…- dijo y después alzó la voz - ¡Vengan todos aquí! –
Malfoy nos miraba a mi y a Anna con odio. Ron nos miraba con una sonrisa, y le susurro a Hermione.
- Después de ti golpeando a Malfoy el año pasado, ellas son mis heroínas – y Hermione sólo empezó a reír, - ¿Soy tu heroína? –
Harry se percató de la risa de Hermione y se giró para verlos. La clase termino y Malfoy se pasó por en medio de Anna y mío, chocando contra nosotras.
- ¡Ya me las pagarán! – dijo y fue seguido de Crabbe, Goyle, y Frank, que pasaron por nuestro lado. - ¡Nadie ataca a un Malfoy! –
- Aja – dijo ella riendo – sólo es un niño de papi. –
Fuimos a el gran comedor, y nos sentamos en la mesa de Gryffindor, Hermione comenzó a comer rápidamente su comida, de una manera que hizo que los 4 (Harry, Ron, Anna y yo) nos quedáramos viéndole.
- ¡Es una nueva estrategia para la liberación de los elfos? – preguntó Ron divertido - ¿Intentas vomitar? – después hizo una cara de dolor, y Harry una de enojo. Parecía que le había propinado un codazo debajo de la mesa.
- No…sólo quiero ir a la Biblioteca – dijo intentando no hablar con la boca llena de alimento –
- ¡Yo te acompaño! – dije para aprovechar para hablar a solas con ella, ya que debía empezar a acercarme más a ellos; conocer la biblioteca, y estudiar un poco más para las clases, que me daban terror.
Ron y Anna nos miraban incrédulos, Harry simplemente sonreía.
- ¿Pero están locas? – dijo Ron – si apenas es el primer día, nadie tiene deberes. Y Anna asintió. Hermione se encogió de hombros y yo me limite a seguir enguyendo mi comida, para acabar a tiempo.
Hermione se levantó y yo, en seguida la seguí.
- ¡Los veré en la cena! – dijo ella –
- ¡Y yo en adivinación! – dije mientras intentaba seguir los rápidos pasos de ella.
Llegamos a la Biblioteca, y ella fue rápidamente a los estantes. Yo, agotada por el ejercicio hecho después de la comida, saque un libro de encantamientos de mi mochila, que llevaba todo el día arrastrando. Hermione llegó con 3 libros, y se la pasó buscando en los libros. Cuando sonó la campana, Hermione me dio indicaciones de cómo llegar al edificio de adivinación, y salí corriendo. Quisiera decir que dí rápidamente con la torre, y entre a clase al mismo tiempo que todos, pero verán, soy despistada y no muy orientada. Así que…estaba sola en los pasillos buscando la torre de astronomía. Genial. Yo y mi gran idea, y ni siquiera pude hablar con Hermione
- ¿Perdida? – dijo detrás de mí una voz y me giré.
- Marcus – dije feliz de ver a alguien “familiar” - si, soy bastante torpe – dije riendo
- El castillo es muy grande…- dijo el justificando – yo me perdí en la mañana – sonreí.
- ¿Qué clase tienes? – dijo el
- Adivinación – dije frunciendo las cejas –
- ¿Con Trelawney? – dijo el
- Si…-
- ¡Yo se donde es! – dijo – puedo llevarte si quieres... -
Gracias – dije sonriendo, caminamos en silencio por los pasillos y escaleras y llegamos a una trampilla circular que había en el techo, por la que se entraba en el aula donde vivía la profesora Trelawney.
Y me sentí muy rara y feliz cuando recibimos el impacto de un perfume dulzón.
- Muchas gracias, Marius…- le dije y el sonrió.
- Fue un placer Marianne…- dijo el sonriendo, te veré después. Y subí al aula.
- Buenos días querida —dijo la tenue voz de la profesora Trelawney que estaba sentada en un sillón frente a la clase y Harry, dio un respingo. – vi que tuviste un percance, pero…estoy satisfecha de que lo pudieras resolver…- dijo misteriosamente.
- Umm…- dije yo – si –
- Puedes unirte – dijo ella señalando la mesa donde estaban Harry, Ron y Anna.- Como les decía, queridos míos, ha llegado la hora de mirar las estrellas —dijo—: los
movimientos de los planetas y los misteriosos prodigios que revelan tan sólo a aquellos
capaces de comprender los pasos de su danza celestial. El destino humano puede
descifrarse en los rayos planetarios, que se entrecruzan...-
- bla, bla, bla…- dije aburrida y saque un pergamino y comencé a hacer garabatos.
Después la profesora nos dio unos mapas circulares. Harry y Ron se la pasaron bromeando y me tuve que esforzar mucho por no carcajearme, al igual que Anna. Realmente eran malos, para los mapas, Harry tenía dos Uranos, y Ron dejó el mapa después de un rato. Yo me limité a seguir las instrucciones. Y estaba cabeceando mientras Trelawney hablaba feliz y emocionada con Lavender y Parvati, quienes casi gritaban señalando sus mapas. Anna estaba igual de aburrida así que charlaba con Ron, miré a Harry, que borraba sus marcas en el mapa, para volver a calcular en que posición estaban los planetas. Ron se la pasó haciendo comentarios muy graciosos, pero lamentablemente la profesora lo escucho y nos dejo muchos deberes.
Cuando la clase finalizó nos dirigíamos al gran comedor, Hermione nos platicaba emocionada acerca de su clase.
- ¡La profesora Vector no nos ha dejado deberes! – dijo
- Bien, ¡bravo por la profesora Vector! – dijo Ron un poco molesto.
- Oye Hermione, me ayudarías con mis…- comenzó Harry, cuando entramos en el vestíbulo, pero oímos una voz que reconocimos al instante.
- ¡Eh Weasley, Weasley! – nos volvimos para descubrir que se trataba de Draco Malfoy, con su acostumbrado séquito, y de nuevo, con Frank, que parecía haberse unido a este; se veían muy felices por alguna razón.
- ¿Qué? – dijo Ron
- ¡Tu padre apareció en el periódico! – dijo en voz alta para lo que escuchara todo el vestíbulo. – MAS ERRORES EN EL MINISTERIO DE MAGIA – comenzó a leer. Era un artículo escrito por Rita Skeeter, - ….otra situación embarazosa ayer con el jefe de departamento del uso indebido de los objetos Muggles Arnold Weasley…- dejo de leer - ¡Ni siquiera escriben bien su nombre, pero….como es un don nadie, nadie debería de recordarlo – hizo una floritura con el periódico y prosiguió con su lectura. Todo el vestíbulo lo miraba. Terminó de leer el artículo, que hablaba de cuando el padre de Ron fue a ayudar a “el profesor Moody”.
- ¡Y viene una foto Weasley! – dijo Malfoy, dándole la vuelta al periódico y levantándolo – son tus padres afuera de tu casa, si es que a eso se le puede llamar casa. Tu madre debería perder un poco de peso, ¿no crees? –
- Mételo por donde te quepa Malfoy – dijeron Harry y Anna al mismo tiempo, y todos los miraron –
- Ah, Potter…- dijo Malfoy – tu estuviste un verano en su casa, ¿verdad? – dijo en tono despectivo – Dime, su madre tiene el aspecto natural de cerdito, ¿o solo es la foto? – Hermione, Anna y yo tuvimos que tomar a Ron de los hombros para que no se abalanzara sobre Malfoy.
- ¿Y te has fijado tu en tu madre Malfoy? – dijo Harry – Esa expresión de estar oliendo mierda, ¿la tiene siempre o sólo cuando tu estás cerca? – el palido rostro de Malfoy, se puso colorado –
- ¡No te atrevas a insultar a mi madre Potter! –
- Entonces, manten cerrada tu grasienta bocaza – dijo Harry y todos nos dimos la media vuelta para entrar al gran comedor, pero tuve un deja vu y me gire antes. Vi como “Moody” le apuntaba a Malfoy con la varita, quien apuntaba a Harry.
- Ah, no ¡Tu no! – dijo, y después Malfoy estaba convertido en un hurón.
Crabbe iba a tomar el hurón ante la mirada horrorizadade Goyle.
- ¡Dejalo! – grito “Moody” y entonces, apuntó con la varita al hurón, haciendolo botar en el aire, cada vez más alto, mientras lo regañaba
- ¡Profesor Moody! – dijo la profesora McGonagall escandalizada
- Hola, profesora McGonagall – dijo el botando con la misma tranquilidad al hurón, mucho más alto, y ahora chillaba de dolor. “Moody parecía disfrutarlo. Cuando la profesora McGonagall se dio cuenta de que era un alumno, hizo que Moody dejara de botarlo , y lo regreso a su forma. Después, lo estaba regañando, diciendole que esas no eran las políticas de Hogwarts.
No puedo mentir, si digo que Malfoy no me dio cierta lástima, estaba rosa, y derramó un par de lágrimas por la vergüenza que sentía. Susurró algo, de lo que sólo logre entender <<”mi padre”>>, y entonces Moody comenzó a gritarle cosas acerca de el, y después lo tomó del brazo para llevarlo a las mazmorras a hablar con Snape.
Ron estaba muy feliz por esto.
- No me hablen – dijo caminando al comedor, pero en ese momento llegaron Ginny y Heather; su amiga castaña.
- ¡Hola chicos! – dijo Ginny, y Ron la miró y le iba a decir, “no me hables”, pero vió a Heather, sonrió y dijo
- – Hola chicas. –
- ¿Por qué no querías que te habláramos? – dijo Harry –
- Para conservar este momento en mi memoria… - dijo el con una sonrisa de satisfacción. El increíble hurón botador…- todos rieron con el comentario, mientras nos sentábamos en la mesa.
- Pero la profesora McGonagall hizo bien en detenerlo, Malfoy pudo haber sido lastimado. – Anna asintió en silencio mientras masticaba su filete.
- Oh vamos, no lo arruinen - dijo el y Hermione hizo una mueca. –
- No estamos en la edad media…- dije yo molesta, ya que sabía la verdadera identidad de Moody, y sabía por que hacía todo lo que hacía. Pero, yo impediría que Barty Crouch cumpliera por lo que había ido a Hogwarts. Hermione comenzó a comer a gran velocidad, y entonces Harry le preguntó desanimado si debía volver a la biblioteca.
- Si – dijo ella rápidamente, y luego mordió un pan.
- Pero has dicho que la prosfesora Vector…- comenzó Ron, pero Hermione lo cayó.
- No son deberes – dijo y comenzó a tomar grandes sorbos de su vaso.
- Eso es…eso es…- dije cuando me di cuenta de esto - ¿jugo de calabaza? – dije emocionada.
- Dah…- dijo Ron y Heather comenzó a reir, y el sonrió satisfecho.
- ¡No seas grosero Ron! – dijo Hermione
- Al fin, alguien aprecia mi sentido del humor Hermione –
- Bien por ti – dijo Harry que de repente parecía molesto.
- Si … es jugo de calabaza – dijo Hermione y entonces tomé mi vaso emocionada, y me lo iba a llevar a la boca. Trataba de no lucir demasiado emocionada.
- ¿En España no tienen jugo de calabaza? – preguntó Anna, lo que hizo que bajara el vaso.
- No – dije e iba a beberlo otra vez
- Osea que no lo has probado – dijo Ginny y yo impaciente baje de nuevo el vaso –
- No –
- Oh bueno, ¡te gustará mucho! – dijo Hermione – pruébalo –
- <<”Eso intento”>> - pensé molesta y me iba a llevar el vaso a la boca de nuevo, cuando alguien dijo mi nombre por atrás
- ¡Marianne! – dijo una voz con un acento extraño –
- ¿Es que hoy es el dia de molesta a quien va a tomar jugo? – pregunté dejando el vaso en la mesa. Pero Heather y Ginny que estaban enfrente de mi, me miraban con una sonrisa extraña, y con un gesto me indicaban que volteara. Ron fingió una tos. Me giré y vi a Marius detrás de mi.
- Marcus – dije –
- Hola Marianne, hola Anna – dijo saludando también a Anna – hola, desconocidos – dijo mirando a Harry, Ron, Herminone, Ginny y Heather. -
- Un placer – dijo Hermione levantándose – si me disculpan, yo debo irme. –
- ¡Nos vemos en la sala común! – dijo y se fue caminando rápidamente, yo quería acompañarla, pero terminó mucho antes que yo.
- Hola – dijeron todos y siguieron comiendo –
- ¿Te dijo algo Trelawney? – dijo el sonriendo
- No… - dije sonriendo y queriendo omitir lo de “la predicción” –
- Que bien…- dijo el – bueno, venía a cenar, pero me quede preocupado. – dijo sonriendo -
- ¡Eh, Marius! – dijeron un par de Ravenclaws que estaban a unos metros – ¡tenemos hambre! –
- ¡Ya voy! – grito el y después se giró hacia nosotros de nuevo. – iré a cenar…te veré después –
- Claro Marius – dije y el se alejó a su mesa –
- ¡Claro…Marius! – dijeron Ginny y Heather en tono de burla, y yo me sonroje, Fred y George llegaron a sentarse entre Anna y yo, en el sitio que dejó libre Herminone.
- ¿Quién es Marius? – dijo Fred con una sonrisa sirviendose
- El chico de intercambio…- dijo Heather levantando una ceja y sonriendo.
- Eh…¿ya tomaron clases con el profesor Moody? – dijo Ron cambiando bruscamente el tema y los gemelos, junto con Lee Jordan que se sentó al lado de Ginny, comenzaron a alabarlo….teníamos clases con el hasta el jueves.
El día siguiente amaneció nublado. Teníamos hora doble de pociones con Slytherin.
Cuando llegamos a las mazmorras, en mi intento por, hacer que Harry y Hermione permanecieran más tiempo juntos, quise convencer a Ron de sentarse con Anna.
- Ron, ¿Por qué no te sientas con Anna? – dije señalando una mesa, y Anna me volteó a ver extrañada. –
- ¡Claro! – dijo el sonriendo – Anna, ¿eres buena en pociones? – dijo cuando se hubieron sentado en la segunda mesa, que había del pizarrón a la otra pared.
- Se me defender – dijo ella sonriendo
- ¡Genial! – dijo el sonriendo - ¿me ayudarás? –
- ¡Claro Ron! – dijo ella riendo, Hermione me miró y sonrió, ella iba a decir algo, así que antes de que pudiera ofrecerme ser mi pareja, exclame.
- ¿Neville Longbottom? – esperando a que alguien me respondiera, ya que no sabía quien era Neville aún.
- ¿Si? – dijo mirándome confundido un chico de cara redonda.
- ¡¿Quisieras sentarte conmigo? – dije señalando la segunda mesa –
- Pero…- dijo el mirándome preocupado – yo no soy muy bueno –
- Creo que yo tampoco… - dije sonriendo – pero quiza entre los dos podramos ayudarnos, ¿quieres? – dije
- Claro – dijo el - ¿Y tu eres? –
- Marianne, Marianne Siegrist – Hermione se quedó pensando y después miró a Harry, quien le sonrió.
- ¿Serías mi equipo? – dijo el
- ¡Si! – exclamó ella feliz –
Y, rápidamente, puse mi mochila en la cuarta mesa. Para que Harry y Hermione se sentaran enfrente de mi, y detrás de Anna. Cuando ellos se hubieron sentado, la puerta se abrió.
Severus Snape, uno de los personajes que más odie al inicio y terminaron haciendome llorar al final, haciendo que pensara muy diferente de el. Entro a las mazmorras de mal humor, y su capa ondeaba tras el, llegó al frente y nos miró. Su grasiento cabello se abría como dos cortinas y se veía un poco alterado. Nos dio unos 10 minutos de sermón. Y comenzamos a hacer la primera poción. Fui detrás por los ingredientes, y ya que esta materia me aterraba, había leído la noche anterior el procedimiento en el libro, el cual volví a abrir en ese momento. Puse el caldero a un fuego bajo. Debíamos hacer un antídoto y comencé con sumo cuidado a picar todas las cosas, y pelar raíces. Mi poción iba bien, y Neville miraba su caldero un poco preocupado. Había pasado una hora y media, y mi poción hervía con un azul ultramar, que era un tono más obscuro que el que decía el libro debía tener, debo admitir que me costo trabajo, pero estaba muy satisfecha.
Intentaba ayudar a Neville, a mejorar la suya. Puse un poco más de polvo de escarabajo, y la poción agarró un tono azul rey. Estábamos cerca y se veía estable. De repente escuché a Anna gritar.
- ¡No! – y la miré mientras tomaba algo con la mano que estaba a punto de caer en su caldero. Miré la escena extrañada, y ella volteó a ver alarmada mi caldero.
- ¡Marianne! – dijo, y baje mi vista, burbujas de un verde neón crecían y crecían en mi caldero…
Con pánico, tome la tapa de la que Mark se burló por ser…”inútil”, y la puse encima del caldero. Después apagué la flama. Pero se podían escuchar aún las burbujas. Hice lo primero que se me ocurrió y apunte hacia la tapa.
- ¡Depulso! – exclamé, y pasó algo extraño, la tapa impactó con la poción que había explotado, y la tapa quedo soldada al caldero.
Cuando vi que no se movía, y que ya no representaba ningún peligro, miré. Todos me veían sorprendidos alrededor.
- Vaya, vaya…- dijo Snape – pero si es la mesa de Longbottom…- y sonrió con malicia. Pero su sonrisa se convirtió en expresión sorprendida, cuando vió la poción de Neville, de color azul hirviendo. Y después miró mi caldero.
- ¿Siegrist? – dijo mirándome – Vaya…otra Gryffindor. Parece, que siempre hay uno que tenga que arruinar pociones. O más…
- Profesor..- iba a decir Hermione –
- Guarde silencio Granger – dijo el mirándola molesto. Y entonces me di cuenta de que Malfoy intentaba llamar mi atención con señas. Cuando lo ví, me hizo una sonrisa triunfante alzando las cejas retadoramente.
- ¿Qué fue lo que pasó? – dijo Snape mirando mi caldero soldado a la tapa.
- ¡Yo lo vi todo profesor! – dijo una alumna de cabello negro y corto con túnica de Slytherin. Supuse que sería Pansy Parkinson.
- La poción iba a explotar…- dijo ella –
- ¿Explotar Siegrist? – dijo el mirándola
- Esta arriesgando la vida de sus compañeros.
- Ella lo arreglo – dijo Anna y Snape la miró frio, y continuó.
- Dos gryffindors más…No discuta Spinelli, - dijo y me señalo – la señorita Siegrist violó las medidas de seguridad de esta clase. -
- <<”Genial….- pensé – ahora deberé limpiar sesos de rana…”>> -
- Acompáñeme Siegrist – dijo frío y yo lo miré angustiada. – Acompáñeme. – repitió el, ya que al principio, del miedo no me moví. Tome mis cosas, y vi que el gis del pizarrón escribía algo.
Una Gryffindor menos.
Miré hacia los Slytherin y Draco Malfoy alzaba su varita como un trofeo, mientras los demás Slytherin no hacían nada por contener su felicidad. Todos menos Frank, que me miraba, pero no pude definir cual era la emoción en su rostro.
- Te lo dije – me dijo Malfoy sin hablar, mientras yo lo miraba –
Tomé mi mochila, y estaba preparada para seguir al profesor, que había ido a su escritorio, pasando por alto el letrero en el pizarrón, tomó unas hojas, y dijo.
- Señor Malfoy, esta a cargo de la clase; quiero los antídotos en las botellas, y se los haré probar a cada uno de ustedes.- Mis nuevos amigos me miraron angustiados. Yo hice un intento de sonrisa para tranquilizarlos. Y, por fin, seguí a Severus Snape por los pasillos. Caminando hacía lo que temía, mi expulsión de Hogwarts.
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XOXO!!!!
Gracias por leer....y por comentar..!!
Las quiero!!
¡Me voy a comer! XD!!!
OOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOMMMMMMMMMMMMMMMMMMMGGGGGGGGGGGGGGGGGGGGGGGGGGGGGGGGGGGG!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!! DIOS!!!!!!!!!!!!! NOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO ODIO A SNAPE!!!!!!!!!!!! LO ODIO!!!!!!!!!!!!! AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHH
ResponderEliminarNO PUEDE ECHARTEEEEEEEEEEEEEE NOOOOOOOOOOOOO ES UN MAL..... JAJAJAJAJA
ME ENCANTO HERMANITA EL CAPITULO... ME FASINO QUIERO LEER MASSSSSSSSSS ESPERO ANSIOSA... JEJEJEJE
LO AMEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEE
ESE RON ES UN TIERNO!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!..... JJEJEJEEJ ME ENCANTOOOOOOOOOOOO JEJEJEEJEJ
Aaaaaaaaaaaaaaaaahhh!!! genial el capitulooo!!!
ResponderEliminarpor fin me puse al día!! yeyyy!! :D
me encanta esta historia!! es muy genial!!!!
Y Draco ¬¬!! jaja xD
me encanta me encanta!!!!
aaaaaaaaaaaaaayyy!!! ya quiero otro capitulooo!!! :D
Te quiero Vale!!! amo tus historias!!! ;)